domingo, septiembre 18, 2005

LA ADOLESCENCIA, ESE DIFÍCIL PASO A LA MADUREZ


EL HOGAR, SIMBOLO DE CONTINENTE AFECTIVO.

La propiedad más importante del ser humano, es su capacidad de formar y mantener relaciones. Estas son absolutamente necesarias para que cualquiera de nosotros pueda sobrevivir, aprender, trabajar, amar y procrearse.

“Antes se pensaba al individuo como una noción cerrada, pero hoy sabemos que necesitamos de otros seres humanos para llegar a ser nosotros mismos”
[1]

Las relaciones humanas toman muchas formas, pero las más intensas, las que producen mayor placer y a veces mayor dolor, son aquellas con la familia, amigos y personas amadas. Dentro de este círculo interno de relaciones íntimas, quedamos vinculados o adheridos unos a otros con un “adhesivo emocional”, vinculados o adheridos con amor.

La habilidad individual para formar y mantener relaciones haciendo uso de este “adhesivo emocional” es diferente en cada uno de nosotros. Algunos parecen ser “naturalmente” capaces de amar y establecer relaciones íntimas, otros no tiene tanta suerte, carecen de capacidad afectiva y les cuesta hacer amigos, además de establecer una relación distante con la familia.

El acto de coger el bebé al hombro, mecerlo, cantarle, alimentarlo, mirarlo detenidamente, besarlo y otras conductas nutrientes asociadas al cuidado de infantes y niños pequeños, son experiencias de vinculación. Algunos factores cruciales de estas experiencias de vinculación incluyen la calidad y la cantidad.
Los científicos consideran que el factor más importante en la creación del apego, es el contacto físico positivo (ej: abrazar, besar, mecer, etc.), ya que estas actividades causan respuestas neuroquímicas específicas en el cerebro que llevan a la organización normal de los sistemas cerebrales responsables del apego.

La relación más importante en la vida de un niño es el apego a su madre o cuidador primario, esto es así, ya que esta primera relación determina el “molde” biológico y emocional para todas sus relaciones futuras.
“Un bebé sano, no tiene ninguna responsabilidad de desarrollarse, si en torno a él no hay otro ser humano para encantarlo”
[2]

Un apego saludable a la madre, construido de experiencias de vínculo repetitivas durante la infancia, provee una base sólida para futuras relaciones saludables.
En la actualidad está tomando importancia la relación o vínculo de apego del niño con el padre, figura ésta de gran importancia para el normal desarrollo evolutivo de todo ser.

Para Cyrulnik, el “Encantamiento”, como el lo denomina, no sucedería, si no existiera una persona que fuera referente significativo para el niño. Él menciona en primer lugar a la madre, como la proveedora principal de la satisfacción de las necesidades primarias del niño. Este vínculo sería el de mejor “calidad”, sin embargo, en su ausencia, existen otros sustitutos compensatorios, que pueden cubrir esas necesidades, aunque en menor grado de satisfacción o “encantanmiento” para el niño.

Sin embargo en este último caso, se altera el proceso de apego primario – el que corresponde a la madre - . Existen niños que al sufrir algún grado de alteración de este apego, ya sea porque sus padres murieron, o por ser abandonados en algún grado, comienzan a presenta una serie de trastornos asociados a esta situación de carencia afectiva y falta de referente significativo. Comienzan a tener una aceptación pasiva y obediente frente a todo lo que sucede. Su autoestima comienza a deteriorarse y surge en él una inestabilidad emocional. Aparecen graves retardos en su desarrollo físico, emocional e intelectual; retrasos en su lenguaje, en la marcha y en la talla entre otros.

La pérdida o la amenaza de pérdida de la persona significativa, evoca una intensa ansiedad. Los investigadores de la conducta infantil entienden como apego la relación madre-infante, describiendo que esta relación ofrece el andamiaje funcional para todas relaciones subsecuentes que el niño desarrollará en su vida.
[3]

Boris Cyrulnik, manifiesta que a medida que el niño se va desarrollando en el seno familiar, comienza a establecer e incorporar una serie de patrones de comportamiento social y afectivo, sin embargo, deja de manifiesto, que el niño, en su relación de apego con sus padres y tomando como caso específico de un niño con su madre, éste ve a aquella, como un ser “sexuado”, es decir, que él entiende el concepto de género, sin embargo, no es objeto de apetito sexual. Desde la mirada freudiana, el niño sí puede llegar a sentir que su madre es exclusiva para él, y que su lazo está por sobre el que ella tiene con su padre. Cyrulnik, señala que de suceder esto, “sería una gran angustia incestuosa”.

En cuando a su significado esencial el niño se halla situado en una especie de triángulo afectivo con relación a sus padres, de modo que está envuelto en una red de deseos amorosos hostiles con respecto a aquéllos. Este conflicto puede presentarse bajo dos formas :

· Complejo de Edipo positivo: el triángulo afectivo se resuelve a favor del progenitor de sexo opuesto ; la hostilidad por tanto, será dirigida hacia el progenitor del mismo sexo (la madre en el caso de la niña y el padre en el caso del varón).

· Complejo Edipo negativo: en esta forma el progenitor del mismo sexo la madre, en el casi de la niña, y el padre en el caso del varón, se convierten en los depositarios del complejo edípico.

Según Freud, el Edipo se resuelve por el temor (la fantasía del varón a ser castrado por su padre). Evidentemente, este postulado es radicalmente abstracto. Una manera de explicarlo, lo más sencillamente posible, sería ésta: el padre se interpone en una suerte de “idilio” entre madre e hijo. Sin embargo el niño percibe que el padre es el sujeto amoroso de la madre (es su rival). Por otro lado también participa del afecto de su padre.

Este conflicto irá perdiendo fuerza (es decir, el niño renunciará a poseer a la madre), en la medida que el niño se sienta ligado al padre por un fuerte afecto, y por el temor de ser castigado por el.

Siguiendo a Freud, la formas de encarar el Edipo tendrá mucha importancia en la elección del objeto sexual del adulto (es decir puede condicionar tanto la heterosexualidad como la homosexualidad).

Para el pasaje de la infancia a la edad adulta se requiere una clase especial de desplazamiento del deseo. Este desplazamiento que se da atañe exclusivamente a los deseos incestuosos, tiene una sola dirección y es irreversible.

El heredero del complejo del Edipo es el Súper Yo que representa la conciencia moral ( en parte consciente y en parte inconsciente) del sujeto, así como sus ideales. El Superyó se estructura en oposición al Yó (que se identifica con la conciencia, con el sentido de la realidad). Otra instancia del mundo psíquico freudiano es el Ello, que constituye el mundo inconsciente de las pulsaciones del sujeto, y por tanto abiertamente opuesto al Superyo que, como vimos, representa la sublimación positiva y creadora de los instintos inconscientes.

Es por eso, -señala Cyrulnik, que el adolescente, debe tener la libertad para adquirir esta autonomía afectiva con otros fuera de su núcleo familiar, es decir, de ser capaz de pasar de un “Encantamiento Primario” a uno secundario, con otros referentes afectivos, que no son sus padres. Él aprende como “encantan” sus padres, modelos de los cuales, copiará sus aspectos relevantes, para crear su propia forma de “encantar “ y “atrapar a otros.

El niño va desarrollando etapas, hasta convertirse en un adolescente y con ello enfrentando un si número de “crisis”.

El origen etimológico lo de la palabra crisis (Krisis) que significa juicio, marca un momento de ruptura casi lineal entre el pasado de un niño, pronto a desaparecer y el futuro de un adulto por venir.

“Cuando la dificultad de un problema sobrepasa los recursos que se disponen para enfrentarlo, sobreviene la crisis. Se trata, pues, un desorden, un desequilibrio que irrumpe en la supuesta armonía de un orden establecido y conocido por él”.
[4]

“El peligro es la confusión de rol que en este período ocurre cuando las etapas anteriores, y particularmente la identidad sexual no han sido adecuadamente resueltas.”[5]

La deficiencia en la confusión de rol lleva a dudar sobre la propia identidad sexual, situación que provoca mucho y provoca demandas y reproches hacia los pares y adultos.

La búsqueda de identidad, el horror al incesto hace que el adolescente busque el objeto amoroso fuera del seno familiar, una salida exogámica..
La problemática adolescente remite a diversas dimensiones convergentes que se anudan en una verdadera encrucijada difícil de resolver.Desde el enfoque tradicional, la adolescencia constituye un período de transición de un momento a otro, un paso de la niñez a la adultez, un período crítico y conflictivo.

“Una interesante propuesta es la de abordar la adolescencia como producción socio-histórica ya que al parecer, "las sociedades primitivas no poseían la idea de adolescencia como la que actualmente conocemos, sino que realizaban ritos de iniciación que al ser "pasados" por los jóvenes, les concedían de manera inmediatamente el estado de madurez, de manera que los primitivos no parecen conocer "las tempestades y tensiones" que caracterizan "nuestra" adolescencia”.
[6]

Es interesante la propuesta porque si uno observa otras culturas que no son occidentales, la vida de los jóvenes, no está tan cargada de "demandas, de observaciones, de esperas...", estoy de acuerdo con lo que plantea Fernández, cuando afirma "que la adolescencia sería un fenómeno propio de determinadas formaciones sociales "avanzadas", concretamente de las sociedades capitalistas urbanas y en último término, un efecto de su modelo económico de producción y de distribución del trabajo.

“La pubertad, es un fenómeno biológico, mientras que la adolescencia, es un fenómeno psicosocial”.
[7] El investigador, concuerda con estas afirmaciones, agrega: “Ya no existen rituales de integración en las sociedades occidentales, en éstas, se han destruido los rituales de acogida”.






La condición de este nuevo tipo de identificación con el rol ciudadano, nos enfrenta a una contraposición de dos realidades diferentes que se entrelazan en la temporalidad y estas son:

- Que las identidades modernas eran territoriales y monolingüísticas y las identidades posmodernas son transterritoriales y multilingüísticas. En consecuencia, la identidad como acto de apropiación simbólica, abandona el domino territorial para situarse en la dimensión del consumo.

En las denominadas sociedades primitivas, es habitual que el ingreso a la adultez se haga directamente desde la infancia a través de un ceremonial. Estos constituyen los rituales de iniciación, y adoptan para cada cultura muy variadas modalidades (corte de cabellos, tatuajes, aislamiento). En las sociedades modernas también existen estos ritos por ejemplo la fiesta de los quince, el viaje de egresados etc.)

Es en etapa donde se enfrenta un proceso fundamental y es el pasaje de la endogamia
[8] a la exogamia.[9] La salida exogámica implica además, el logro de la autonomía.

Las modificaciones de los órganos sexuales pueden ser sustituidas por sacrificios llamados "tribales”, la abrasión de los dientes (saras del Chad, Nubas de Sudán o los mongos del Zaire). También pueden colocarse labros o discos en los labios o en la nariz. Todas estas transformaciones hacen que los cuerpos de los adolescentes pasen del dominio de la naturaleza al de la cultura y los trasladan de las libertades de la infancia a la realidad de la vida adulta.

Se realizan servicias por los miembros de las "clases" precedentes: flagelaciones, quemaduras, picaduras de insectos, ayuno, privación del sueño, etc, que deben soportar sin protestar, así como la circuncisión y los sacrificios. Pues despreciar el dolor, no exteriorizar el sufrimiento, significa observar la palabra, demostrar que se es dueño de si mismo.

Se trata de un nuevo nacimiento, pero éste es colectivo. Los nuevos iniciados ya no son los hijos de una pareja sino de un clan.

“Los adolescentes, necesitan diferenciarse de su familia de origen para crear su propia identidad y reforzar su sentido de pertenencia. “
[10]

En efecto, se puede afirmar que en este milenio, los adolescentes enfrentan un período histórico crecientemente conflictivo en el que integrarse creativa y constructivamente a la sociedad, lugar que se les exige pero que no se les facilita.

En la entrevista, el investigador, hace referencia a que en los países pobres, no existe adolescencia, ya que los jóvenes deben salir rápidamente al campo laboral – desertando del sistema escolar – y que las muchachas, son madres precoces. Por otro lado - afirma – que en las sociedades desarrolladas, el proceso de escolarización se prolonga, lo que prolonga su entrada a la sociedad que los espera.

Argumenta, que algunos países europeos, han implementado sistemas innovadores para que un adolescente pueda integrarse sin “traumas” a la vida en sociedad, y es promoviendo experiencias en otras culturas durante un período de dos años, antes de ingresar a la universidad, tales como: trabajo solidario, trabajos en comunidades, etc. De manera de ir incorporando nuevas experiencias en este “mundo real y concreto”, al cual están invitados a participar. En nuestro país, eso sería posible en estratos sociales altos – en donde si se sabe de experiencias de intercambio estudiantiles, en las que se llega a otro país a estudiar, acogido en otro seno familiar, que no es el propio Sin embargo, los de “abajo”, debimos “madurar” a duras penas trabajando y estudiando a la vez, ayudando a llevar la pesada carga del sustento a nuestros padres. Estamos lejos de esa realidad, aún tenemos cifras importantes de línea de la pobreza, para estar preocupándonos de sentirnos mejor, como que esa “suave iniciación en sociedad”, pasa a ser secundaria.

“La adolescencia, es una edad difícil y si vemos las tasas de depresión y de suicidio juvenil, parece que lo está haciendo crecientemente.”
[11]

Particularmente, el suicidio entre los adolescentes, ha tenido un aumento dramático en los años recientes, Inclusive según datos de la ONU, en ciertos países como EEUU, el suicidio es la cuarta causa de muerte más frecuente para los jóvenes de entre 15 y 22 años de edad, y la sexta causa de muerte para los de entre 5 y 14 años.

Los adolescentes experimentan fuertes sentimientos de estrés, confusión, dudas sobre sí mismos, presión para lograr éxito, inquietudes financieras y otros miedos mientras van creciendo.

En algunos casos, el suicidio aparenta ser una "solución".
Hay que darles las herramientas necesarias al adolescente para que se sienta útil, valorado, en fin que su vida tenga sentido. Sin embargo, es hora de conectar el tema con uno de los conceptos centrales del contenido de la entrevista de Cyrulnik a Carmen Rodríguez del diario El Mercurio, cuando la periodista le pregunta cómo define el término “Resiliencia”.

” La Resiliencia es retomar un tipo de desarrollo después de una herida traumática, exige que se haya estado en agonía psíquica, que la persona se haya sentido casi muerta, y que en ese momento, la resiliencia consiste en volver a la vida.”


“Cada persona brilla con luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas. Algunos fuegos, fuegos bobos no alumbran ni queman, pero otros arden con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear y quien se acerca se enciende.”[12]

La teoría de la resiliencia cobra significado a partir de las diferencias en la reacción ante circunstancias adversas, generadoras de estrés. Mientras algunas personas sucumben a dichas circunstancias, evidenciando desequilibrio y trastornos a diversos niveles. Otras se desarrollan exitosamente a pesar de la adversidad.

La resiliencia es en términos de ingeniería es la capacidad de un material para recobrar su forma original, después de someterse a una presión deformadora. En este trabajo, sin embargo, retomamos la más reciente acepción de esta palabra, que designa la “capacidad de una persona para superar bien condiciones adversas de la vida.”
[13]

Por lo general la resiliencia ha sido estudiada en lo referente a la manera sorprendente de muchos niños y niñas maltratados de distintas formas para sobreponerse y mantener su vitalidad y esperanza.

Como seres humanos, pese a vivir en diferentes condiciones cada ser, por lo menos en algún momento de la vida los problemas nos han hecho tocar fondo. De hecho, a veces se ha dicho que hay que tocar fondo para poder tomar conciencia, valorar lo que se tiene ( aunque sea poco) y levantarse. Puesto que si nos dejáramos vencer por ese tipo de situación, nuestras vidas perderían toda conducción y sentido.

A continuación se detallan diez puntos que fortalecen internamente el poder personal
[14]

Trato estable con al menos uno de los padres u otra persona de referencia.
Apoyo social desde dentro y fuera de la familia
Clima educativo emocionalmente positivo, abierto, orientador y regido por normas.

Modelos sociales que estimulen una “manera de ser en constante construcción.
Balance de responsabilidades sociales y exigencia de resultados.
Competencias cognoscitivas.

Rasgos que favorecen a una actitud eficaz.

Experiencia de auto eficacia, confianza en uno mismo y concepto positivo de uno mismo.

Actuación positiva frente a los inductores del estrés.
Ejercicio de sentido, estructura y significado en el propio crecimiento.
Se puede considerar que las principales actitudes que fortalecen en los factores protectores o resilientes en los humanos son:

· Demostraciones físicas y verbales de afecto y cariño en los primeros cuatro años.
  • Reconocimiento y atención a sus éxitos y habilidades.
    Oportunidades de desarrollo de destrezas.
  • Actitud de cultivo, cuidado y amor por parte de todos sus semejantes y especialmente de los encargados de su cuidado y protección.
  • Apoyo de un marco de referencia ético, moral y espiritual.

Volviendo a la entrevista, se puede hacer un paralelo con lo planteado por Boris Cyrulik, quien manifiesta que para que en una persona en esta caso, un adolescente, pueda desencadenar en él un proceso de Resiliencia, debe desarrollar recursos internos en tres niveles:

1° Adquirir sus propios recursos durante sus primeros años de vida, aquí hace referencia a la importancia de la figura de apego.
Si un niño tiene sus necesidades básicas llenas, tiene más opciones de éxito en el futuro, si a esto le añadimos el contacto físico, las caricias y el respeto de sus padres o familiares, su desarrollo en todos los aspectos será armónico.
2° Adquirir un auto conocimiento sobre el significado personal ante una situación traumática.
3° Este nivel, es independiente y externo a la persona, y tiene que ver con aquellos grupos humanos con los que el “herido” retomará su desarrollo, es decir, la red de apoyo circundante.

Existen algunas variables o factores de riesgo, estos son considerados como ese algo que opera para mitigar los efectos del riesgo. Se consideran fuerzas internas y externas que contribuyen a que el niño resista o aminore los efectos del riesgo, por tanto, reducen la posibilidad de disfunción y problemas en estas circunstancias, como los factores de riesgo los factores protectores involucran también variables genéticas, disposiciones personales, factores psicológicos, situacionales y sociales.

La periodista vuelve a la carga con preguntas muy interesantes en relación a si la Resiliencia aflora de la nada, o existe un componente genético que la programa. Cyrulnik, insiste:

“La Resiliencia no puede surgir de la nada, puesto que un niño sano no puede desarrollarse si no hay en torno a él alguien para “Encantarlo”.
Esto lo manifiesta en contrapartida a opiniones opuestas de “algunos que pretenden” afirmar que existe un componente genético de la resiliencia en los animales y en los humanos.

En éste, como en cualquier otro caso, el aceptar o rechazar a priori una teoría no proporciona argumentos científicos, y ya en la historia de las Ciencias Naturales hay muchos ejemplos que prueban la inadecuación de las posturas apriorísticas.
En su afán, a mi juicio exagerado y poco objetivo, de luchar contra el determinismo biológico bajo cualquiera de lo que ellos consideran sus cuatro principales formas sociales (racismo, superioridad de clase, sexismo y naturaleza humana), muchos niegan de forma excesivamente radical la influencia de la condición biológica del hombre -la naturaleza humana- sobre su propio comportamiento individual y social.

La metodología genética permite diseñar los experimentos apropiados para discernir en muchos casos entre el componente genético y el componente ambiental.

“Existe un cromosoma que posee un conjunto de genes llamados 5HTT, y este conjunto de genes estimula la secreción de serotonina… los seres vivos capaces de secretar mayor cantidad de esta enzima, son menos vulnerables.”
[15]

Seguro que ya algún científico habrá pensado -sin entrar en los problemas éticos- en la utilización de la clonación humana para obtener repetido un mismo genotipo muchas veces y aplicarlo en estudios de comportamiento: individuos genéticamente idénticos son sometidos a distintos ambientes físicos y culturales para analizar y comparar sus pautas de comportamiento.

En la entrevista, el investigador señala, que estudios revelan que los mamíferos con 5HTT corto, son muy fáciles de herir y están bajo en la escala jerárquica. Sin embargo, en seres humanos, los cuales podemos modificar nuestro entorno a diferencia de los animales, con 5HTT corto , se las “arreglan” para sobrellevar esta condición, buscando una vida más estable y rutinaria, en la cual puedan controlar su vida y no exponerse a situaciones riesgosas que lo “hieran o desestabilicen”, situación de la cual sería muy complicado reponerse o reconstruirse. Por otro lado señala que las personas que tenemos 5HTT largo, detestamos la rutina, buscamos constantes cambios en nuestras vidas, somos más resistentes y tolerantes al fracaso.
Pero vayamos a la vida real, al hombre de la calle. El desarrollo del ser humano como tal, como persona, es un problema doble de información hereditaria: la herencia biológica (genética) y la herencia cultural. Desde el punto de vista biológico, cada ser humano recibe de sus padres, vía gametos, una información genética contenida en el ADN; desde el punto de vista cultural, cada ser humano recibe de su entorno familiar y social una información cultural de elementos aprendidos, disponibles generalmente en forma de símbolos escritos o de prácticas consuetudinarias tradicionales. El problema está en cuál de los dos componentes (biológico y cultural) influye más en las pautas de comportamiento individual y social en determinadas circunstancias. Yo no estoy de acuerdo con posturas radicales que rechazan uno u otro planteamiento, los factores biológicos y ambientales están íntimamente relacionados en una compleja red de interacciones entre el hombre y el ambiente que se traducen en las pautas observadas de comportamiento humano y de las instituciones sociales. A partir de todo lo expuesto sobre los factores de riesgo y protectores así como los mecanismos que los subyacen, se puede concluir que la combinación de múltiples factores de origen genético, psicológico, social y situacional puede determinar un estado de riesgo o de resiliencia en el niño.

… La Resiliencia genética, aunque genética, depende mucho de la organización del medio social y cultural”.
[16]

BIBLIOGRAFÍA.

- Bercovich, S. (1994) El sujeto de la adolescencia. en inscribir el psicoanálisis. Año 1 Nº2 Junio - diciembre.

- Carballo, S. (2002). educación de la expresión de la sexualidad. revista educación. Número 26, volúmen 1. universidad de costa rica.

- Revista latinoamericana de psicología Fraser 1997.



- ENTREVISTA A BORIS CYRULNIK, por el diario el mercurio, mayo 2005, santiago, chile. MATERIAL DE APOYO DE LA CÁTEDRA Mg. dr. juan manuel guajardo rubilar.

[1] BORIS CYRULNIK “ LA SOCIEDAD NO ACOGE A LOS JÓVENES” .
[2] BORIS CYRULNIK, NTREVISTA DIARIO EL MERCURIO, 06-05- 2005, SANTIAGO.
[3] Dr Eduardo R. Hernández González.Pediatra y Terapeuta de la Conducta Infantil.
[4] Bercovich, S. (1994) El sujeto de la adolescencia. en inscribir el psicoanálisis. Año 1 Nº2 Junio - diciembre.

[5]Carballo, S. (2002). educación de la expresión de la sexualidad. revista educación. Número 26, volúmen 1. universidad de costa rica.


[6] Fernández, M. (1998) La adolescencia como problema.
[7] boris cyrulnik, entrevista para el mercurio, 06 de mayo, 2005.
[8] orientación sexual infantil (familiar, incestuoso)
[9] . la orientación sexual genital adulta (extrafamiliar, no incestuosa)

[10] boris Cyrulnik, entrevista para el mercurio, 06 de mayo, 2005.

[11] Boris Cyrulnik, entrevista para el mercurio, 06 de mayo, 2005.

[12] En este relato de GALEANO, se resumen las dos aristas filosóficas de la teoría de la resiliencia la primera se relaciona con la idea de la luminosidad.
[13] Revista latinoamericana de psicología Fraser 1997.
[14] Revista latinoamericana de psicología", Fraser 1997.

[15] Boris cyrulnik, entrevista diario el mercurio, santiago .chile. mayo 2005
[16] BORIS CYRULNIK, ENTREVISTA PARA EL DIARIO EL MERCURIO, MAYO DE 2005, SANTIAGO, CHILE.